Clasificatorio
para el Nacional de Magic 2001
Falta poco ya para el clasificatorio para
el Nacional de Magic 2001, y salvo las cartas
nuevas, la sensación y preguntas son las mismas
que cada año anterior, qué mazo se comportará
mejor contra el mazo más usado, si uso el
más popular sucumbiré a las contramedidas
y mazos “anti-mi mazo” que van a abundar,
me da susto la Luz Diurna, me destruyen
con el Boil, se acaba mi juego con
el Armagedón, etc. Durante estos meses
he testeado dentro de las posibilidades de
mi carpetita y cajita feliz, más el auspicio
sincero y desinteresado de mi Compadre Thrull,
Sopapa, Beck, y otros gargales de la fauna
local, para encontrar, tal vez no el mejor
mazo para enfrentar el clasificatorio, que
eso no lo sabrá nadie hasta que termine el
torneo, sino la baraja que me parezca más
estable, confiable y eficiente de cara a el
ambiente que se de en el torneo.
Mi
primer intento fue un Fires chanfleado
que me ayudó a hacer el Compadre Thrull:
Fires
por Ricardo y Thrull
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Mazo:
4 Aves del Paraíso
4 Foresta Karplusana
4 Elfos de Llanowar
4 Matorrales
4 Fuegos de Yavimaya
7 Bosque
4 Sello de fuego
5 Montaña
4 Blastodermo
3 Estallido de Saprolines
1 Rith la Despertadora
4 Idolo Quimérico
3 Boa de Río
2 Sello de limpieza
2 Armagedón
4 Asalto / Violencia
1 Hidra Antigua
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Auxiliares:
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...El
mazo era entretenido, rápido, y el combo de
los saprolines con fuego era top, y con el
blastodermo era LETAL, pero, en el mid-game
se desinflaba tremendamente, los rebeldes
terminaban por entrarle, las iras lo destruían,
no sé, parece que cuando perdí confianza en
el mazo empezó a irse cada vez más a pique,
hasta que ya no le ganaba ni a los mazos de
ezperimento. Le probamos varias modificaciones
que rondaron lo bizarro, más daño, con Iras
de Urza, Martillo de Bogardán,
o ponerle Armodón Adiestrado, Crecimiento
Gigante, Kavu Astado, y mil machitunes
más, pero no pasó nada, le faltaba control.
Luego
el Moncho fue mecenas para construir un Blue
Skies, que funcionaba mejor y era también
divertido de jugar, aparte que las cartas
no eran difíciles de conseguir, pero no logré
acostumbrarme a los counters misteriosos que
ocupa, pues aunque permitían contrahechizar
sin mana, eventualmente terminaba jugando
al bluff con el oponente, en el turno 5 ó
6 y mirando con la misma cara que sale en
el Daze, mirando que mi oponente podía
pagar el coste extra sin arrugarse, así que
me duró poco.
El
amigazo Warrior (Guerrero), me otorgó un subsidio
para que armara con sus cartas un mazo Void
y lo probara, y así lo hice por un tiempo;
el primer turno montaña, sello, fuera Ave,
segundo turno Ritual, abajo Espectro
Llameante, fuera carta de la mano... pura
alegría, sonrisa en la cara, que venga el
siguiente oponente. Pensé “...Ahora sí que
trituro, con este bicho y un Void en
la mano soy indestructible”, pero no fue así,
por que luego me fui dando cuenta de que los
primeros turnos más que de espectro se juega
de espectador, que si no está la combinación
de tierras el espectro sale sólo en las Lobotomía
del oponente, y que aunque se supone que era
un mazo de control, no controlaba tanto como
yo pensaba, y lo noté más al toparme con los
controladores que usaban azul, o sea, pura
tristeza y dolor.
Probé
también los famosos y folclóricos Rebeldes,
pero, aunque el mazo es bastante sólido y
digno (he jugado con monocolor blanco en muchos
torneos desde hace tiempo, y el banquillo
es insuperable), el mazo me aburrió antes
de terminar el primer partido, y ni siquiera
me animó a construir una versión propia, porque
eran tan iguales entre sí los que vi que con
ver uno y jugarlo me enteré de lo que podía
esperar del mazo. Es un mazo respetable y
una buena opción, pero aparte de bajar los
rebeldes y más rebeldes, no ofrece más variedad,
así que cualquier carta de remoción masiva
como Void, Ira de Dios, Tumulto, Masacre,
Terremoto, etc., representa una amenaza
que el mazo tolera, pero no contrarresta,
y que deja como opción de juego una sola vía,
llenar la mesa de bichos y sobrepasar al oponente
con la protección adecuada o por arriba, lo
que me parece efectivo, pero no contra
cualquier mazo.
El
Compadre Thrull saltó entonces con que “...Si
le falta control, ensártale unos counter entre
medio, ahí tienes...”, y armó un Counter-
Rebel, con unos Mariscales Ramosianos,
Reinas Jhovales y otras hierbas, pero
que aunque mejoraba, aún era muy bizarro para
mi gusto, ya que en el juego casual en la
Piyán sacaba muchas victorias, pero
que proyectado a un torneo me parecía que
el usar la habilidad del Mariscal te dejaba
rogando por un Boil, por el costo terrible
de traer otro 3/3 a la mesa, mejor aún una
Reina Jhoval. Aunque bueno,
aún no me convencía.
Después
de todo eso, retomé el proyecto que dejara
truncado por falta de recursos cuando recién
salió Invasión, que era usar el Foso
de Teferi de algún modo, y que me llevó
a probar en su momento el Djinn Zánam,
el Djinn Sirviente Contratado, y otros
imbunches misteriosos para ganar supremacía
aérea. Con el tiempo y las ideas más evolucionadas,
me parece que también resulta en una buena
opción, principalmente por su flexibilidad
frente a los otros mazos que probablemente
me voy a encontrar, lo que me da confianza
en arrancarle unos cuantos puntos al torneo
y si funciona, clasificar.
U/W
Ricardo
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Mazo:
4 Contrahechizo
4 Torre Costera
4 Absorber
4 Yermos de Adarkar
4 Iras de Dios
6 Llanuras
4 Conocimiento Acumulado
10 Islas
2 Tumulto
2 Impacto Desmantelador
3 Realidad o Ficción
3 Foso de Teferi
2 Sumidero de Poder
2 Ángel Cegador
3 Elemental del Aire
1 Máscara de Marfil
1 Descaminar
1 Ganancias Decrecientes
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Auxiliares:
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No
uso los 4 Realidad o Ficción porque
no los uso hasta que haya recursos suficientes,
y aunque apuran y sirven montones, no los
puedo jugar al primer ni segundo ni al tercer turno, y cuando usé
los cuatro mi biblioteca se disolvía muy rápido
y a veces incluso perdía por eso,
lo que me llevó a probar las Ganancias
Decrecientes, que hasta ahora anda bien,
llevo un Descaminar y una Máscara
de Marfil en el mazo principal por el
ambiente en que combato, repleto de Iras
de Urza hasta las mazas, por los Martillos
de Bogardán, que son un dolor de guata,
y las molestas cartas de descarte, que también
joroban bastante. Además, si no me sirve la
Máscara, enfrentando a un rebelde,
por ejemplo, la desencanto pagando el kicker
y, oh misterio, tengo dos cartas por si las
moscas. Aunque los demás de los Arauco
Juzams en Temuco arrugaban la frente cuando
la bajaba, bien luego se fijaron que ya no
me ganaron a martillazos, ni morí por Ira,
ni me controlaron la mano, no me lobotomizaron,
y los más califas sacrificaron sus sellos
rojos que tenían guardados para el remate,
lo que me permitió a su vez bajar más de una
vez con más calma un Ángel o un Elemental...
Muy probablemente no sea esta la versión
exacta que use, pues con el regreso de Serra
y Mahamoti el Elemental del Aire
volverá a valer dihueñe, como corresponde,
y de paso quizás me permita por fin ir a un
torneo con un mazo de ángeles...
Kaervek
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